Dos payasos se encuentran en la tele y va uno y le dice al otro: "¡Y tú más!". Entonces va el otro payaso y le responde al uno: "¡No, tú mucho más!". Así que el primer payaso se da la vuelta, coge una tarta que hay detrás de él y se la estampa en la cara al otro. Éste también se da la vuelta, coge otra tarta y le aplica un tartazo al primero. El payaso número uno, con toda la cara llena de merengue, hace un puchero y le dice con voz llorosa al payaso número dos: "Venga, hagamos las paces. Te regalo esta flor como signo de amistad". Saca una enorme margarita de su levita y se la ofrece al otro. El payaso dos se acerca despacio, balbuceando y haciendo deditos avergonzado, y, cuando va a olerla, un chorro de líquido azul sale de la margarita directo a a su cara. El payaso uno se ríe a carcajadas señalándole con el dedo...
Parece que con sus cosas nos hacen reir. No es verdad: son ellos los que se ríen de nosotros.
Me están entrando ganas de hacer algo bestia de verdad. Como dejar el vídrio en el contenedor amarillo o subir al primer piso en ascensor o peinarme a raya... no sé, algo que sea muy punk.
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